miedo

El miedo

El miedo, impide Ser. No es sencillo enfrentarse a situaciones donde despierta el miedo aunque sea un sentimiento irracional. Además, la mayoría de las veces no sabemos de dónde procede nuestro miedo, sobre todo, porque prevalece un hábito en las personas por justificar todo lo que hacemos, lo que nos mantiene alejados de nuestro conocimiento interior. A nadie le gusta reconocer sus propias miserias aún cuando forman parte del desarrollo del Ser. Son como piedrecitas que indican el camino de retorno a uno mismo, pero como son desagradables las vivimos como obstáculos. Es aquí, donde comienza la paralización: angustia, ansiedad, frustración, impaciencia, entre otras emociones…

Cuesta comprender y aceptar debido al modo de vida actual donde impera la prisa, preferimos huir de cualquier modo de alteración interna que pueda tocar o frenar nuestro estado de ánimo. La dificultad está, en que no somos conscientes de que es el miedo la causa.

Los antiguos hablaban del miedo como la parte que desconoce la persona de si misma, haciendo referencia a la sombra que nos hace inconscientes.

Es curioso pensar que nos conocemos a nosotros y a los demás, pues que significa conocerse? desde mi punto de vista asumir nuestros actos cómo parte de nuestro proceso sin justificarnos o responsabilizando a otros. Este proceso nos ayudará a entender más fácilmente nuestro actuar, comprender que hay formas distintas de entender la misma cosa, ya que somos diversidad.
Disponer de flexibilidad para aceptar que no todo se puede superar pero es posible convivir con ello dignamente.

Pretendo transmitirte con éste artículo que no te preocupes demasiado cuando mires a tu alrededor y pienses que otros no lo viven cómo tú. Al final todos somos humanos y sentimos aunque tengamos recursos distintos para resolver los problemas.

Dejo una reflexión de los filósofos antiguos:
» definían al miedo como ausencia de amor».

Los comentarios están cerrados.